San Isidro, nace en Madrid hacia 1082, en el seno de una familia muy humilde que se sustentaba gracias a los trabajos realizados en el campo, para una familia de renombre. Cuando trabajaba como jornalero, solía repartir sus ganancias entre la iglesia, los pobres y su familia. Por ese motivo, se le considera como el patrono de los agricultores de España y del mundo entero. Se conocen algunos detalles de su vida por las alabanzas que indica un códice encontrado en la Iglesia de San Andrés en 1504 (denominado como Códice de San Isidro y escrito a finales del siglo XII) y donde se denomina Ysidorus Agricola. En 1960 el papa Juan XXIII le declara mediante bula como santo patrón de los agricultores españoles.
San Isidro nace en época de la Reconquista en tiempos en que el rey leonés Alfonso VI llega a Madrid, que se encontraba en manos de la taifa de Toledo. San Isidro nace de una familia de colonos mozárabes que se encargó de repoblar los terrenos ganados por Alfonso VI. Sus padres eran de origen humilde y cabe que le llamaran Isidro en honor de San Isidoro , cuyo cuerpo se había llevado recientemente a León (1063).
Por los milagros que a él se atribuían, desde el siglo XIII y en adelante, se reza a San Isidro para pedir agua para los campos en primavera, momento crucial para que salieran adelante los cultivos sin los cuales las familias sufrían terribles hambrunas, es por ello que su intercesión se generalizó en todo el territorio español en zonas campesinas e incluso se extendió hasta lugares de América Latina, representando también un modo de vida humilde y cercano a la naturaleza.
San Isidro, como patrono de las mujeres y hombres agricultores, suele representarse con una herramienta del campo en la mano; en ocasiones, como en la imagen de Carbajal de la Legua, al lado de unos bueyes, representando aquel milagro de cuando su amo iba a reñirle por rezar en lugar de trabajar y, al acercarse, observar que los bueyes araban solos.
Imagen de San Isidro en las cuatro localidades del municipio: Azadinos, Carbajal de la Legua, Pobladura del Bernesga y Sariegos.
San Isidro era una fiesta muy celebrada en todas las localidades del municipio, hasta los años 60-70 aproximadamente, se sacaba en procesión, se adornaba con centeno y se bendecían los campos; la fiesta continuaba con reparto de escabeche y con concursos de arados para ver quién hacía el surco más recto.
Mujeres ataviadas con el traje regional el día de San Isidro en Pobladura, años 60.
En Pobladura se ha celebrado siempre como fiesta grande del pueblo.
La fiesta se celebraba de modo muy similar en todas las localidades.
El día anterior a la fiesta, las mujeres adornaban la iglesia y al santo, se le ponían unas espigas verdes de centeno.
Se adornaba la iglesia con flores naturales de las que se encontraban en el pueblo (lilas, peonías, copos de nieve, lirios, calas y también piornos floridos). Las flores se solían poner en la fachada de la iglesia y flores silvestres repartidas por el suelo, delante del templo.
En el día de fiesta se celebraba una misa con procesión y eran los hombres los que tradicionalmente se encargaban de llevar a hombros las andas con el santo.
Durante la misa del 15 de mayo, a través de un cántico propio para este día, se pide que no falte el agua y la protección de los campos a través de la bendición de los mismos.
En Azadinos, el santo se llevaba a las afueras, en Pobladura hasta un lugar céntrico del pueblo; en ambos casos se procedía a la bendición de los campos con ayuda del agua bendita y de las oraciones propias para ese momento.
De regreso a la Iglesia se finaliza el acto con unas plegarias y el reparto del «pan de la caridad». En Pobladura del Bernesga se entregaba en las ofrendas, junto con el pan y el vino, un objeto relacionado con el campo y una hogaza de pan. Esta hogaza una vez que se bendecía por el sacerdote se partía en trozos y se daba a los asistentes al finalizar el acto litúrgico.
En las fotografías, diversos momentos del día de la celebración en Pobladura del Bernesga en diferentes años, a partir del 2000.
En la revista «Fiestas tradicionales en Pobladura del Bernesga» de la Asociación Sociocultural «La Panzuela» en el año 2008 , se realizó el III concurso de investigación y redacción y sobre el tema de la fiesta de San Isidro Labrador, hubo 3 personas que recordaron los siguientes datos. Estos vecinos nacieron a principios de los años 30 en Pobladura del Bernesga.
«Antiguamente, la gente de Pobladura celebraba la fiesta de San Isidro en Sariegos. Era por la tarde, después de acabar las tareas, cuando chic@s y demás vecinos iban al «Salón de Tasio» para bailar, el día del patrón de los labradores. Fue a finales de los años 50 cuando ya se festejó este día con música, en nuestro pueblo» (Rosario Diez Getino).
«Un año , entorno a 1957-1959, engalanaron un carro; en él, pusieron ramas de chopo y a San Isidro en el medio. Iba tirado por un par de vacas. Chicas del pueblo, vestidas con trajes regionales, iban acompañándolo en la procesión y tiraban flores durante el recorrido de la misma » (Evangelina Diez Getino)
«En los años 50, el día de San Isidro, en Valdesancho, se hacía un concurso con arado de madera en las tierras de siembra para ver quien hacía los surcos más rectos. El ganador obtenía un premio en metálico.» (César Rodríguez Diez)
Según testimonios de las personas más mayores, existe en el recuerdo que al finalizar el acto religioso se daba escabeche con cebolla acompañado de vino y acompañado de música tradicional culminaba un día de fiesta . También hace muchos años ( 50-60) hubo concurso de arada,
Refranes que se decían:
Por San Isidro viene el sol y vase el frío.
Si se desigualó el sembrado, por San Isidro está igualadado.
San Isidro labrador, quita el agua y trae el sol..
Por San Isidro, aré lo que pude.
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